Nuestro último día en la capital porteña lo dedicamos a explorar el barrio de San Telmo.
Este barrio tiene mucho encanto y una gran personalidad. Callejeamos, disfrutamos de sus plazas, parques, terrazas y mercadillos. Las antiguas mansiones se dividieron en lo que llaman conventillos, bloques de pisos para familias pobres, aunque actualmente artistas y bohemios las ocupan.
Barrio de San Telmo
Cabe destacar el mercado de antigüedades en la plaza Dorrego, el mercado de San Telmo y otro que hay en un edificio cercano en el Pasaje de la Defensa y la Iglesia de Belén.
Antiguedades y artesanía, eso es lo que se respira en este barrio bohemio.
San Telmo
Descansamos un rato en el hostel antes de coger las mochilas, nuestro vuelo sale a las doce de la noche.
Cogemos un taxi al Aeropuerto Internacional Ezeiza de Buenos Aires, por el camino nos encontramos un mitín político, miles de personas cortan las calles y tenemos que buscar una ruta alterrnaiva, menos mal que vamos con tiempo de sobra.
San Telmo
El taxista nos informa que toda esta gente vive en los barrios humildes conocidos como Villas. A cambio de sus votos el gobierno les permite coger luz y agua de forma gratuíta, la contrapartida a parte del voto es asistir a todos los mítines para los que les facilitan autobuses para desplazarse.
Plaza Dorrego
Llegamos al aeropuerto sin contratiempos.
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